La misa negra

Ningún elemento ha sido asociado con  el Satanismo tanto como la misa negra - Según Anton LaVey-. El decir  que la más blasfema de todas las ceremonias  religiosas no es mas que una invención literaria es, de  hecho, una afirmación que necesita evaluarse .pero  nada podría ser mas cierto.

El concepto popular de la misa negra es el  siguiente: Un sacerdote excomulgado se halla ante un  altar que consiste en una mujer desnuda, sus piernas  abiertas de par en par y su vagina expuesta,  sosteniendo con cada uno de sus puños cerrados una  vela negra hecha de la grasa de niños sin bautizar y  reposando sobre su vientre un cáliz que contiene la  orina (o la sangre) de una prostituta. Sobre el altar  cuelga una cruz invertida, y hostias triangulares  hechas de pan quemado o de nabo ahumado son  bendecidas metódicamente a medida que el sacerdote  las unge obedientemente deslizándolas dentro y fuera  de los genitales de la mujer que sirve de altar. A  continuación, se nos dice, se hace una invocación a  Satán y a varios demonios, seguida por una cantidad  impresionante de oraciones o salmos cantados al  revés o repletos de obscenidades intercaladas... todo  ello realizado dentro de los confines de un  pentagrama .protector. trazado en el suelo. Si el  Diablo aparece, lo hace invariablemente bajo la forma  de un hombre bastante deseoso que sobre sus  hombros porta la cabeza de un chivo negro. A  continuación sigue un popurri de flagelaciones,  quema de libros de oración, cunnilingus, felaciones, y  besuqueo general de cuartos traseros .todo hecho  teniendo como trasfondo recitaciones obscenos de la  Sagrada Biblia y expectoraciones continuas bastante  audibles sobre la cruz! Si durante el ritual puede  sacrificarse un bebé, tanto mejor; porque como todo  el mundo sabe, éste es el deporte favorito del  Satanista!

Si esto suena repugnante, entonces es fácil  entender el éxito que tuvieron los reportes sobre misas  negras en mantener a los fieles devotos en el seno de  la iglesia. Ninguna persona .decente., al enterarse de  tales blasfemias, podría dejar de tomar partido por los  inquisidores. Los propagandistas de la iglesia hicieron  bien su trabajo, informando al público a su debido  tiempo de las herejías y actos horrendos de los  paganos, cátaros, bogomilos, templarios y muchos  otros quienes, debido a sus filosofías dualistas y su  .a veces. lógica Satánica, tenían que ser  erradicados.

Las historias de niños sin bautizar que eran  robados por Satanistas para utilizarlos en su misa no  sólo fueron métodos de propaganda bastante  efectivos, sino que también proveyeron a la Iglesia de  una fuente constante de ingresos, mediante  contribuciones de los feligreses por concepto de  bautismos, cuando las preocupadas familias corrían a  bautizar sus hijos para que no se los llevaran.  Ninguna madre cristiana, al escuchar de los  diabólicos secuestros, se abstendría de bautizar a sus  hijos, y mientras más rápido, mejor.  Otra faceta de la naturaleza del hombre quedaba  patente en el hecho que el escritor o artista de  pensamientos lascivos podía ejercitar sus preferencias  más obscenas al retratar las actividades de los  herejes. El censor que vigila toda la pornografía para  saber de qué tiene que advertir y proteger a otros es el  equivalente moderno del cronista medieval de los  actos obscenos de los Satanistas (y por supuesto, sus  equivalentes periodísticas modernas). Se cree que la  más completa biblioteca de pornografía del mundo ¡es  propiedad del Vaticano!

El besar el trasero del Diablo durante la misa  negra tradicional es fácilmente reconocible como el  antecesor del término moderno utilizado para  describir a quien obtiene algún beneficio material  halagando el ego de otro. Como todas las ceremonias  Satánicas se realizaban teniendo como objetivo cosas  reales y materiales, el oscularum infame, (o beso de  la vergüenza) era considerado un requisito simbólico  para el éxito terrenal, más que espiritual.

La creencia popular es que siempre se ha llamado  misa negra a la ceremonia o servicio Satánico. Una  misa negra no es la ceremonia mágica practicada por  Satanistas. El Satanista sólo hará uso de una misa  negra como una forma de psicodrama. Además, una  misa negra no implica necesariamente que quienes la  lleven a cabo sean Satanistas. Una misa negra es  básicamente una parodia del servicio religioso de la  Iglesia Católica Romana, pero puede ser aplicada  libremente como sátira a cualquier ceremonia  religiosa.

Para el Satanista, la misa negra, en su blasfemia  de ritos ortodoxos, no es más que una redundancia.  Los servicios de todas las religiones establecidas son  en realidad parodias de antiguos rituales celebrados  antaño por los adoradores de la tierra y la carne. En  un intento de desexualizar y deshumanizar las  creencias paganas, los responsables de las creencias  espirituales posteriores encubrieron el significado  verdadero que había tras los rituales bajo blandos  eufemismos que hoy se tienen por .misa verdadera..  Aún si el Satanista fuera a pasársela celebrando una  misa negra cada noche, no sería una parodia más  grave que la del piadoso feligrés que asiste  compulsivamente a su propia .misa negra. .su  burla de los honestos y emotivos ritos de la  antigüedad pagana.

Cualquier ceremonia considerada una misa negra  debe ser ofensivo, indecente y ultrajante, ya que esta  parece ser la medida de su éxito. En la Edad Media,  blasfemar contra la santa iglesia era algo indecente.  Sin embargo, la Iglesia no presenta hoy en día la  imponente imagen que tenía durante la Inquisición.  La misa negra tradicional ya no es el espectáculo  ultrajante que una vez fue para el diletante o  sacerdote excomulgado. Si el Satanista desea crear un  ritual con propósitos de psicodrama para blasfemar  una institución aceptada, será cuidadoso al escoger  una a la que no esté de moda parodiar. De esta  manera, estará parándose sobre una vaca sagrada.  Hoy en día, una misa negra consistiría en  blasfemar temas tan .sagrados. como el misticismo  oriental, la psiquiatría, el movimiento psicodélico, el  neoliberalismo, etc. Se defendería el patriotismo, las  drogas y sus gurús serían vapuleados, se deificaría a  los militantes aculturales, y podría dársele un  empujón Satánico a la decadencia de las teologías  eclesiásticas.

El magus Satánico siempre ha sido el catalizador  de la dicotomía necesaria para modelar las creencias  populares, y en este caso una ceremonia de la misma  naturaleza que una misa negra puede servir para un  propósito mágico de largo alcance.

En el año 1666, ocurrieron en Francia ciertos  acontecimientos bastantes interesantes. Al fallecer  François Mansart, el arquitecto del trapezoide, cuya  teoría geométrica se convertiría en el prototipo de la  casa encantada, se construía, según sus planos, el  Palacio de Versalles. La última de las glamorosas  sacerdotisas de Satán, Jeanne-Marie Bouvier  (Madame Guyon) iba a ser superada por una astuta,  oportunista e implacable mujer de negocios llamada  Catherine Deshayes, también conocida como  LaVoisin. Aquí había una cosmetóloga que, mientras  practicaba abortos y vendía los más efectivos venenos  a damas deseosas de librarse de sus maridos o  amantes, encontró en los espeluznantes relatos de las  .messes noir. una genial idea capitalizadora.  Seria correcto decir que 1666 fue el año de la  primera misa negra .comercial.. En la región al sur  de St. Denis, conocida hoy como LaGarenne,  LaVoisin compró una inmensa mansión flanqueada  por altos muros, adecuándola con despensas, celdas,  laboratorios y... una capilla. Para la realeza y otros  diletantes menores, pronto sería de rigueur asistir y  participar en el mismo tipo de servicio previamente  mencionado en este capitulo. El fraude organizado  perpetrado en éstas ceremonias ha quedado marcado  en la historia de manera indeleble como la .verdadera  misa negra..

Cuando LaVoisin fue arrestada el 13 de Marzo de  1679 (en la Iglesia de Nuestra Señora de las Buenas  Nuevas, para más señas) la suerte estaba echada. Las  actividades degradadas de LaVoisin habían sofocado  la majestad del Satanismo para mucho rato.  La siguiente moda del .Satanismo por juego y  diversión. apareció en Inglaterra a mediados del siglo  XVIII en la forma de la Orden de los Franciscanos de  Medmanham de Sir Francis Dashwood, conocido  popularmente como el Club del Fuego del Infierno o  Hell-Fire Club16. Mientras eliminaba la sangre y las  velas hechas de grasa de niño de las misas del siglo  anterior, Sir Francis se las arregló para conducir  rituales repletos de buena y pícara diversión, y  ciertamente proveyó a muchas de las luminarias de la  época con una variante inofensiva y colorida de  psicodrama. Una actividad palalela bastante  interesante de Sir Francis, que nos puede dar una idea  del ambiente y calidad del Club del Fuego del  16 Los Hell-Fire Clubs o Clubes del Fuego del Infierno era un nombre  genérico que se aplicaba a varios grupos conformados por miembros de las  clases privilegiadas de Irlanda e Inglaterra durante los siglos XVII y XVIII. 

(Para mayor información, ver Apéndice I)

Infierno, era el llamado Club Dilettante17, del cual Sir  Francis era fundador.  Sería el siglo XIX el que trajo consigo un  encubrimiento del Satanismo, llevado a cabo por los  débiles intentos de magos .blancos. tratando de  practicar magia .negra.. Este fue un período muy  paradójico para el Satanismo, con escritores tales  como Baudelaire y Huysemans quienes, a pesar de su  obsesión aparente con el mal, parecían buenas  personas. A ojos del público, el Diablo desarrolló su  personalidad Luciferina, y evolucionó gradualmente  hasta convertirse en un caballero de salón. Esta fue la  era de los .expertos. en las artes negras, tales como  Eliphas Levi e innumerables médiums quienes, con  sus espíritus y demonios cuidadosamente amarrados,  lograron atar las mentes de muchas personas que  hasta el día de hoy se llaman a sí mismos  ¡parapsicólogos!.

En cuanto al Satanismo, lo más cercano que hubo  fueron los ritos neopaganos llevados a cabo por la  Orden Hermética del Alba de Oro (Hermetic Order  of the Golden Dawn)18 y después por dos órdenes  fundadas por Aleister Crowley, la Orden de la  Estrella Plateada (A.·. A.·. .Astrum Argentuum) y  la Orden de los Templarios Orientales (O.T.O.)19  quienes, a pesar de que el mismo Crowley se  identificaba como la Bestia del Apocalipsis, niegan  paranoicamente hasta el día de hoy cualquier  conexión con el Satanismo.. Aparte de alguna que  otra poesía más bien agradable y un conjunto de  17 El Club Dilettante fue una asociación de renombre en su época, que  perseguía intereses puramente culturales. 

(Para mayor información, ver  Apéndice I).

18 The Hermetic Order of the Golden Dawn, (Orden Hermética del Alba  de Oro), fue una secta ocultista inglesa dedicada a la enseñanza y práctica  de la magia que se atribuía a Hermes. (Para mayor información, ver  Apéndice I).  19 Ordo Templi Orientis, la versión de Crowley de la secta alemana del  mismo nombre, que fuera fundada originalmente en 1902, y que  practicaban los mismos rios expuestos en el presente volumen.

Para fernalia mágica, cuando no se dedicaba a escalar  montañas, Crowley pasaba la mayor parte de su  tiempo como un posudo por excelencia, y que  trabajaba horas extras para ser lo más malo posible.  Al igual que su contemporáneo, el Reverendo  Montague Summers, Crowley pasó gran parte de su  vida con su lengua metida entre la boca, pero sus  seguidores hasta el día de hoy parece que de alguna  manera son capaces de leer significados esotéricos en  cada una de sus palabras.  Paralelamente con estas sociedades, estaban los  clubes de sexo que utilizaban al Satanismo como un  gancho .costumbre que persiste hasta la fecha, y  por lo cual deberían estar agradecidos los reporteros  de periódicos baratos y amarillistas.  

Parece que la misa negra evolucionó de una  invención literaria de la Iglesia, a una manera  depravada de ganar dinero, a ser un psicodrama para  diletantes e iconoclastas, convirtiéndose luego en un  as bajo la manga para los medios de comunicación  populares... si ésto es así, ¿cómo es que encaja en la  verdadera naturaleza del satanismo .y quién  practicaba la magia satánica en los años anteriores a  1666?  

La respuesta a este acertijo yace en otro. ¿Está la  persona que generalmente es considerada como  Satanista, practicando el Satanismo en su verdadero  significado, o lo hace desde el punto de vista tomado  por los fabricantes de opiniones de la persuasión  celestial? Siempre se ha dicho, y de justa manera, que  todos los libros escritos sobre el diablo han sido  escritos por los agentes de dios. Por consiguiente, es  muy fácil entender cómo surgió cierta especie de  adoradores del diablo, a través de las invenciones de  los teólogos. Este personaje .malo. no está  necesariamente practicando Satanismo verdadero.  

Tampoco es la encarnación viviente del elemento de  orgullo desenfrenado, o de majestad del ser, que el  mundo postpagano dio a la definición clerical de lo  que era malo. Por lo tanto, es el producto de una  propaganda mucho más tardía y elaborada.  

El pseudo-Satanista siempre se las ha arreglado  para aparecer a lo largo de la historia moderna, con  sus misas negras de distintos grados de blasfemia;  pero el Satanista verdadero rara vez es reconocido  como tal.  Sería una simplificación extrema el decir que todo  hombre y mujer de éxito que hay en la tierra es, sin  saberlo, un Satanista practicante; pero la sed de éxito  terrenal y sus beneficios son argumentos suficientes  para no contar con la aprobación de San Pedro. Si la  entrada de un rico al cielo es algo tan difícil como el  intento del camello de pasar por el ojo de una aguja;  si el amor por el dinero es la raíz de todo mal;  entonces por lo menos debemos suponer que los  hombres más poderosos sobre la tierra son los más  satánicos. 

Esto se aplicaría también a banqueros,  industriales, papas, poetas, dictadores, y cualquier  vocero y mariscal de campo de las actividades del  mundo.  Ocasionalmente, a través de varios .nexos.,  siempre se hallará que a los hombres y mujeres más  enigmáticos de la historia se les ha acusado de haber  .practicado. las artes negras. Estos, por su puesto,  salen a la luz como los .hombres enigmáticos. de la  historia. Nombres como Rasputin, Zaharoff,  Cagliostro, Rosenberg y otros por el estilo son  eslabones .o rastros por así decirlo., del verdadero  legado de Satán... un legado que trasciende cualquier  diferencia étnica, racial y económica, lo mismo que  trasciende ideologías temporales. 

No importa bajo  qué nombre se le conozca, el Satanista siempre ha  dominado la Tierra... y siempre lo hará.  Una cosa es segura: los parámetros, filosofías y  prácticas expuestas en estas páginas son utilizadas  por los humanos más autoconscientes y poderosos  sobre la Tierra. En los pensamientos secretos de cada  hombre y mujer aún motivados por mentes claras e  inquietas, reside el potencial del satanista; como  siempre ha sido. El signo de los cuernos aparecerá  ante muchos, en lugar de a unos cuantos ; y el mago  dará un paso al frente para ser reconocido.


Extraido directamente de la biblia Satánica de Anton Lavey, sin ninguna edición.

0 comentarios:

Publicar un comentario